Aquí cayeron varios jóvenes
cantaban a la paz.
Gritaban vida.
Defendían su hoy y su mañana.
Uno recuerda libros y pañuelos
camisas o zapatos que perdieron
sus ardorosos propietarios.
Uno vuelve a acordarse del horrible
golpe que les dio ayer la tiranía
con sus armas de fuego.
Y se siente vergüenza
Avergüenza estar vivo.
Aquí cayeron varios jóvenes sinceros.
Se escuchan bien sus quejas.
Se huelen sus olivos.
Aún sobre el asfalto
se ven sus alas rotas
sus banderas...
Un poeta salvadoreño. Antología de Poesía Cristiana en América Latina.
Compilador Arnulfo Vigil. México. 1990.
No hay comentarios:
Publicar un comentario