5. Sobre mi lápiz sólo queda un ángel
un valor carcomido
que se quiebra en mi voz al pronunciarlo.
Debajo de mi cama rueda tinta: mi sangre
oigo un canto sin fondo
vaguedades de un sol que no calienta
un trozo de papel que me delata.
Lo que queda es el eco
o tal vez una breve palabra endurecida
que murmura:dolor.
(fragmento)
PATRICIA VELASCO. Inscripciones de abril. LITERALIA EDITORES.
Guadalajara, México, 2001.
No hay comentarios:
Publicar un comentario